TEORIA PSICOALITICA SIGMUND FREUD
Freud sostiene que el individuo repite experiencias anteriores del género humano en su desarrollo psicosexual.
Consiste en un conjunto de teorías que tratan de demostrar las pulsiones que motivan el comportamiento y que son ignoradas por el sujeto.
Partiendo del concepto de la existencia del inconsciente, donde según Freud se encuentran reprimidos los traumas infantiles, utiliza inicialmente la hipnosis para acceder a los contenidos inconscientes; pero posteriormente cambia esta técnica y recurre a la asociación libre y a la interpretación de los sueños, obteniendo los mismos resultados.
La teoría de Freud sostiene que el niño atraviesa cinco fases definitivas en los primeros cinco o seis años de vida y solo dos más en los quince años siguientes de la niñez y de la adolescencia.
Fase Oral.-Comprende los doce-dieciocho primeros meses. Esta primera fase libidinosa está relacionada con el placer del bebé en el momento de la alimentación , en la que tanto labios como boca tienen un papel preponderante. La satisfacción ligada en un primer momento al acto de comer, adquirirá pronto autonomía, como en el caso del chupeteo, y se convertirá a su vez, en el prototipo inicial de toda satisfacción.
Fase Oral-sádica.- Es considerada una segunda etapa de la fase oral, coincidente con la aparición de la dentición y, por tanto, ligada al acto de morder. Dado que la nueva adquisición tiene un sentido destructivo, da lugar a la aparición del concepto de ambivalencia (relación de amor-odio respecto a un mismo objeto).
Fase Anal.- Se extiende, aproximadamente, entre los dieciocho meses y los cuatro años. La actividad anal adquiere unas connotaciones libidinosas. El ano se constituye en la zona erógena (fuente corporal de excitación) por excelencia. Otra característica de esta fase es la aparición de la polaridad actividad- pasividad, ligada a la posibilidad tanto de retener como expulsar los excrementos.
Etapa fálica.- Durante esta fase, el pene en el varón, y el clítoris y los genitales externos de la niña, pasan a ser las zonas erógenas dominantes. La experimentación y la curiosidad sexual, se acompaña de sensaciones por lo general placenteras, que en el varón se manifiestan con maniobras masturbadoras, en tanto en la niña, pasan mas frecuentemente inadvertidas, y con un menor grado de conciencia.
Otro hecho fundamental en esta etapa del desarrollo son las relaciones amorosas con ambos padres. La elección del amor, se realiza sobre la figura parental del sexo opuesto, y es así, como se convierte el complejo de Edipo en el factor capital de la maduración sexual.
Periodo de latencia.- En esta etapa, que llega hasta la pubertad, según Freud alrededor de los 6 a 8 años, el desarrollo sexual pasa por un periodo de detención o una regresión que en ambos casos, es más favorable, que recibe el nombre de periodo de latencia.
Etapa genital.- Después del periodo puberal, que va desde los 10 años, hasta el comienzo de la pubertad, en edades que varían entre los 12 o 13 años. Esta etapa, es considerada en la teoría psicoanalítica en último escalón en la teoría psicoanalítica de la persona. Con la llegada de la pubertad, los cambios físicos y el empuje hormonal que los provoca, y la madures genital, no implica aun la madurez mental.
Según Freud, el complejo de Edipo, es un conjunto de organizado de deseos y sentimientos amorosos hostiles, que el niño o la niña experimentan con respecto a sus padres. El complejo de Edipo, es vivido en el niño entre los tres y los cinco años de edad durante la etapa fálica del desarrollo. El niño se encuentra en permanente contacto con su madre desde siempre, y al llegar este niño a la etapa fálica, los deseos hacia la madre se acrecientan y el niño la desea para él, como objeto de amor y el padre pasa a ser visto entonces como un rival superior para el amor de la madre. Al aumentar la rivalidad con el padre.
Esta situación es resuelta a través de la identificación del niño con su padre, es decir que el niño toma para sí aquellos aspectos del padre, que hacen que este sea un rival superior para el amor de la madre. De este modo, a través de la identificación con el padre, el niño pasa a ganar en su fantasía el amor de la madre.
Freud sostiene que el individuo repite experiencias anteriores del género humano en su desarrollo psicosexual.
Consiste en un conjunto de teorías que tratan de demostrar las pulsiones que motivan el comportamiento y que son ignoradas por el sujeto.
Partiendo del concepto de la existencia del inconsciente, donde según Freud se encuentran reprimidos los traumas infantiles, utiliza inicialmente la hipnosis para acceder a los contenidos inconscientes; pero posteriormente cambia esta técnica y recurre a la asociación libre y a la interpretación de los sueños, obteniendo los mismos resultados.
La teoría de Freud sostiene que el niño atraviesa cinco fases definitivas en los primeros cinco o seis años de vida y solo dos más en los quince años siguientes de la niñez y de la adolescencia.
Fase Oral.-Comprende los doce-dieciocho primeros meses. Esta primera fase libidinosa está relacionada con el placer del bebé en el momento de la alimentación , en la que tanto labios como boca tienen un papel preponderante. La satisfacción ligada en un primer momento al acto de comer, adquirirá pronto autonomía, como en el caso del chupeteo, y se convertirá a su vez, en el prototipo inicial de toda satisfacción.
Fase Oral-sádica.- Es considerada una segunda etapa de la fase oral, coincidente con la aparición de la dentición y, por tanto, ligada al acto de morder. Dado que la nueva adquisición tiene un sentido destructivo, da lugar a la aparición del concepto de ambivalencia (relación de amor-odio respecto a un mismo objeto).
Fase Anal.- Se extiende, aproximadamente, entre los dieciocho meses y los cuatro años. La actividad anal adquiere unas connotaciones libidinosas. El ano se constituye en la zona erógena (fuente corporal de excitación) por excelencia. Otra característica de esta fase es la aparición de la polaridad actividad- pasividad, ligada a la posibilidad tanto de retener como expulsar los excrementos.
Etapa fálica.- Durante esta fase, el pene en el varón, y el clítoris y los genitales externos de la niña, pasan a ser las zonas erógenas dominantes. La experimentación y la curiosidad sexual, se acompaña de sensaciones por lo general placenteras, que en el varón se manifiestan con maniobras masturbadoras, en tanto en la niña, pasan mas frecuentemente inadvertidas, y con un menor grado de conciencia.
Otro hecho fundamental en esta etapa del desarrollo son las relaciones amorosas con ambos padres. La elección del amor, se realiza sobre la figura parental del sexo opuesto, y es así, como se convierte el complejo de Edipo en el factor capital de la maduración sexual.
Periodo de latencia.- En esta etapa, que llega hasta la pubertad, según Freud alrededor de los 6 a 8 años, el desarrollo sexual pasa por un periodo de detención o una regresión que en ambos casos, es más favorable, que recibe el nombre de periodo de latencia.
Etapa genital.- Después del periodo puberal, que va desde los 10 años, hasta el comienzo de la pubertad, en edades que varían entre los 12 o 13 años. Esta etapa, es considerada en la teoría psicoanalítica en último escalón en la teoría psicoanalítica de la persona. Con la llegada de la pubertad, los cambios físicos y el empuje hormonal que los provoca, y la madures genital, no implica aun la madurez mental.
Según Freud, el complejo de Edipo, es un conjunto de organizado de deseos y sentimientos amorosos hostiles, que el niño o la niña experimentan con respecto a sus padres. El complejo de Edipo, es vivido en el niño entre los tres y los cinco años de edad durante la etapa fálica del desarrollo. El niño se encuentra en permanente contacto con su madre desde siempre, y al llegar este niño a la etapa fálica, los deseos hacia la madre se acrecientan y el niño la desea para él, como objeto de amor y el padre pasa a ser visto entonces como un rival superior para el amor de la madre. Al aumentar la rivalidad con el padre.
Esta situación es resuelta a través de la identificación del niño con su padre, es decir que el niño toma para sí aquellos aspectos del padre, que hacen que este sea un rival superior para el amor de la madre. De este modo, a través de la identificación con el padre, el niño pasa a ganar en su fantasía el amor de la madre.
MECANISMOS DE DEFENSA -ANNA FREUD
Para Ana Freud el desarrollo de las funciones sexuales tiene una influencia psicológica directa en la personalidad y provoca un desequilibrio psíquico, produciendo en los adolescentes conflictos internos.
Durante el proceso del desarrollo del Superyo, en la etapa de la latencia, el niño asimila los valores y la moral de las personas importantes con las cuales se ha identificado, como por ejemplo su padre. De modo que el miedo al mundo externo se convierte en ansiedad interior producida por el Superyo o conciencia y sentimientos de culpa cada vez que su comportamiento no está de acuerdo a su sentido del bien y del mal.
Ana Freud sostiene que en el comienzo de la pubertad aparece un segundo Complejo de Edipo que provoca el mismo miedo a la castración en los varones y envidia del pene en las mujeres, que en el primero.
En este período los impulsos edípicos se pueden llegar a fantasear y la ansiedad del superyo acciona los mecanismos de defensa del yo que son la represión, la negación y el desplazamiento, que vuelven los impulsos libidinales contra si mismo, provocando temores, ansiedad y síntomas neuróticos.
Esta condición conduce a comportamientos que van de las gratificaciones sexuales perversas y el comportamiento agresivo y hasta criminal, en el caso de triunfar el ello, a los rasgos de ascetismo e intelectualización y la acentuación de síntomas neuróticos e inhibiciones cuando el éxito es del yo.
El ascetismo es debido a la desconfianza del adolescente contra los deseos instintivos que trasciende la sexualidad y llega a la comida, el sueño y la vestimenta. Así como el aumento de intereses intelectuales y la preferencia por intereses abstractos en lugar de concretos.
Ana Freud supone que un equilibrio armonioso entre el ello, el yo y el superyo es posible y lo demuestran la mayoría de los adolescentes normales
Otto
Rank – La voluntad
Nacido
en Viena y formado en la universidad de esta ciudad, fue uno de los primeros
discípulos de Sigmund Freud, además de su secretario desde 1905.
Se
distanció de Freud al atribuir el desarrollo de las neurosis a la experiencia
traumática del nacimiento (según él, la más intensa en la vida de una persona)
y no al complejo de Edipo.
La
insistencia de Rank en torno de la necesidad de independencia del adolescente.
Rank
enfocó el desarrollo humano desde un punto de vista más positivo: consideró la
naturaleza humana no como reprimida y neurótica, sino como creadora y
productiva.
Criticó
la importancia que Freud daba al inconsciente como depósito de experiencias e
impulsos del pasado. Rank invirtió esta suposición y volvió al yo consciente
como propio del psicoanálisis.
El
concepto nuclear de su teoría es la voluntad, un factor positivo, una fuerza
que forma activamente el sí mismo y modifica el medio. Por voluntad comprendía
una organización positiva de guía e integración del sí mismo que utiliza en
forma creadora los impulsos instintivos y al mismo tiempo los inhibe y
controla.
El
yo ya está preso entre las fuerzas instintivas del ello y el superyó impuesto
desde afuera; es más fuerza dominante que utiliza y dirige en ambos. Rank se
opuso energéticamente a una interpretación que identifica su concepto de
voluntad con el concepto freudiano de “deseo”. Aunque está más estrechamente
relacionado con el concepto freudiano del “yo”, los dos son sinónimos, puesto
que Rank asigna mayor importancia a la elección y a la actividad.
En
la primera adolescencia, el individuo sufre un cambio básico de actitud,
empieza a ponerse a la dependencia, tanto al régimen de los factores
ambientales externos (padres, maestros, códigos, etc.) como al de los deseos
internos, los impulsos instintivos que acaban de despertar en él. El
establecimiento de su independencia volitiva, cosa que la sociedad valoriza y
exige, llega a ser una tarea importante pero difícil para el adolescente en
desarrollo. Esta nueva sociedad de independencia y la lucha por alcanzarla
constituyen la raíz de muchas relaciones personales del adolescente y de las
complicaciones consecuentes.
El
comienzo de la pulsión fisiológica sexual en la pubescencia amenaza la
independencia recién establecida. Esta amenaza no proviene de personas o
fuerzas exteriores, sino de una necesidad de restricciones e inhibiciones
sexuales externas, puesto que, en la lucha, la propia voluntad del individuo
trata de lograr la independencia contra la dominación de las necesidades
biológicas.
Pero
a medida que va despertando en el individuo en el período de la pubertad, la
sexualidad constituye una fuerza incompatiblemente superior al conjunto de las
autoridades exteriores. Están fuerte y domina al individuo a tal extremo que
pronto éste comienza a defenderse contra esa dominación, precisamente porque es
una dominación, algo que interfiere, de manera dictatorial, su propia voluntad
y aparece como una contravoluntad nueva, ajena y más poderosa justamente cuando
el yo está siendo fortalecido por la pubertad. La razón por la cual el
individuo se defiende tan enérgicamente contra ella reside en que el impulso
sexual biológico lo sometería nuevamente el régimen de una voluntad extraña, la
sexual. Precisamente en un momento en que el yo ha empezado a respirar con un
poco más de libertad, liberándose un poco de la presión de voluntades
autoritarias ajenas.
La
primera de esas etapas consiste en liberar la voluntad tanta de las fuerzas
exteriores como de las interiores que la dominan.
La
segunda etapa se caracteriza por la división de la personalidad. Existe una
desunión entre la voluntad y la contravoluntad.
La
tercera etapa del desarrollo es la integración de la voluntad, la
contravoluntad y la formación de ideales.
De
ello desprende, un poco paradójicamente, que el neurótico que tal vez se
encuentre en la segunda etapa ha alcanzado una forma superior de desarrollo
psicológico que la persona que fue normal en la primera etapa pero que sacrifico
durante la segunda la creatividad y los ideales individuales para llegar en la
tercera a la quietud de la adaptación conformista al mundo externo. Hay dos
aspectos de la personalidad que pueden impedir que un individuo pase de la
segunda etapa a la tercera: la culpa, que inmoviliza su voluntad, y la
desintegración, que influye tanto en sus relaciones externas con los demás como
en su concepto de si mismo y de la estructura del yo.
Erick Erickson
· Erick Erickson (1902-1994 ) : Fue un psicoanalista Alemán que postuló la Teoría del Desarrollo Psicosocial . Enfatizó que la personalidad está influenciada por la sociedad . Él expuso que el desarrollo del yo dura toda la vida . Fue el pionero del Ciclo Vital . Éste consta de 8 etapas. Todas las etapas deben ser resueltas satisfactoriamente para lograr un desarrollo saludable del yo.
· Etapas Psicosociales de Erickson
* Confianza básica frente a desconfianza (del nacimiento a los 12 0 18 meses) - El bebé desarrolla un sentimiento sobre si el mundo es un lugar seguro. Desarrolla un sentido de confianza en la madre,como representante del mundo. Esta confianza forma un cimiento sólido para el futuro. Su confianza está en el mundo exterior.
* Autonomía frente a verguenza (12 0 18 meses a los 3 años) – El niño desarrolla un equilibrio de independencia y autosuficiencia sobre la verg űenza y duda. Cambio del control externo sobre él a uno de autocontrol. Usa sus propios jucios. Controlan su mundo. Ponen a prueba sus ideas, ejercitan sus preferencias y toman sus decisiones. Esto los manifiestan en su negativismo. Son esfuerzos normales y saludables para alcanzar la independencia.
· Cont. Etapas Psicosociales - Erickson
* Iniciativa frente a culpa (3 a 6 años) – El niño desarrolla inciativa cuando intenta nuevas actividades y no es abrumado por la culpa. Siguen sus metas y hacen un balance entre lo que es permitido o no.
* Laboriosidad frente a inferioridad – (6 años a la pubertad) – El niño debe aprender habilidades de la cultura o experimentar sentimientos de inferioridad. Comienza el desarrollo de la autoestima. Comparan las habilidades con las de sus pares. Si su habilidad no está a la par con su pares su autoestima se afecta y buscan la protección de sus padres.
* Identidad frente a confusión de identidad (pubertad a los primeros años de la edad adulta temprana) – Comprende el período de la adolescencia. El adolescente desarrolla un sentido
· Cont. Etapas Psicosociales - Erickson
* coherente del yo, incluyendo el papel que juega en la sociedad. Éstos deben establecer y organizar sus habilidades, necesidades e intereses y deseos de forma que se puedan expresar socialmente. La naturaleza caótica del adolescente se debe a su conflicto de identidad. Lograr la identidad significa que han resuelto los siguientes problemas: 1) elección de una ocupación 2) adopción de valores en qué creer y porqué vivir 3) desarrollar una identidad sexual satisfactoria o definida . Los adolescentes son relativamente alegres, hacen sus compromisos y muestran fidelidad a sus pares.
* 6. Intimidad frente a aislamiento (20 a 40 años – edad adulta temprana) En esta etapa hacen compromisos con otros (amor); terminan sus carreras. Si no logran se aislan de la sociedad.
· Cont. Etapas Psicosociales - Erickson
* Generatividad frente a estancamiento (40 a 65 años – edad adulta intermedia) – Establecer y guiar la siguiente generación (dar consejos). Si no logran esto caen en un empobrecimiento general.
* Integridad del yo frente a desesperación (65 años en adelante – edad adulta tardía) – Aceptan su vida como una productiva o se desesperan por la incapacidad de volver a vivirla.
· Implicación en la Educación
* La teoría Psicosocial del Erickson tiene implicaciones educativas en las siguientes areas: diseño currícular, diseños de planes diarios,disciplina, enseñanza dirigida, orientación y apoyo, entre otros . El maestro debe ofrecer al estudiante experiencias educativas que los ayuden a resolver sus problemas, a desarrollar su autonomía y a tomar decisiones. Se le debe ofrecer apoyo y ayuda especial en las siguientes áreas: disciplina, autocontrol, conducta, estado emocional, problemas de identidad, solución de problemas, adaptación, aceptación, actitudes, valores, interacción con otros, expresión oral, aprendizaje, lenguaje y otros . El desarrollo pleno en todas estas áreas ayudará a los estudiantes a lograr la autonomía y una autoestima saludable.
· Ejemplos prácticos de aplicación en la sala de clase con la Teoría Psicosocial
* Visión Curricular: Ofrecer interacciones apropiadas a los estudiantes de manera que desarrollen una autoestima saludable y un desempeño social y emocional adecuado para su edad.
* Trabajos colaborativos (en grupos)
* Proyectos a realizar en la comunidad
* Giras
* Planeación con la maestra de actividades – toma de decisiones
* Juegos libres
* Estimularlos a entrar en organizaciones estudiantiles como:
* Deportes * Música, teatro, dibujo
* Matemáticas, Ciencias, Estudios Sociales, entre otros
* Organizaciones en la comunidad: Iglesia, deportes, política, grupos de apoyo
No hay comentarios:
Publicar un comentario